Federación de Enseñanza de CCOO de Madrid | 28 marzo 2024.

No falta dinero, falta voluntad política para volver a las 18 y 23 horas lectivas

  • Isabel Galvín, afirma que es necesario un plan de legislatura que incorpore 5.000 docentes a la educación pública madrileña
  • CCOO afirma que seguirá liderando las movilizaciones hasta que se vuelva a las 18 y 23 horas

10/10/2019.
Horas lectivas del profesorado por CCAA

Horas lectivas del profesorado por CCAA

El profesorado de la Comunidad de Madrid imparte más horas lectivas que el de la mayoría de las Comunidades autónomas. Así lo muestra la tabla de clasificación de las horas que imparte el profesorado del resto del Estado, en la que la Comunidad de Madrid ocupa el puesto décimo segundo, un lugar que no está en consonancia con el peso específico de la región a nivel estatal ni con su nivel de renta.

Mientras que otras comunidades autónomas como Navarra y País Vasco han vuelto a recuperar las 18 horas lectivas para su profesorado de secundaria y las 23 horas para el de primaria, Madrid sigue imponiendo 20 horas lectivas para los docentes de secundaria y 25 horas para primaria, lo que supone 45 horas más de media que sus colegas de la OCDE o la Unión Europea.

La reducción de las plantillas de los centros, consecuencia lógica del aumento de las horas lectivas, ha ido agravándose con los años hasta llegar al curso 2019-2020, que mantiene el mismo número de docentes (cerca de 50 mil) que en 2009, mientras que el número de alumnos ha superado el millón.

Frente a las afirmaciones del Consejero en la Asamblea de Madrid, manifestando que no hay dinero para revertir la medida y que se lo va a Pedir al Presidente Sánchez, Isabel Galvín, secretaria general de la Federación de enseñanza de la Comunidad de Madrid, afirma que “la Consejería destina dinero a lo que le interesa, como el cheque de Bachillerato; lo que falta es voluntad política y un plan serio. Las 20 y 23 horas lectivas no son pedagógicas ni mejoran la enseñanza; más bien nacieron para reducir el número de profesores y dañar a la enseñanza pública”.

La vuelta a las 18 y 23 horas lectivas para secundaria y primaria respectivamente traería consigo la contratación de nuevo profesorado, lo que permitiría la bajada de las ratios, la posibilidad de desdobles y de una educación compensatoria de calidad; facilitaría la labor de especialistas orientadores y la dedicación del profesorado a labores tan necesarias como las tutorías, la coordinación con otros departamentos, actividades extraescolares o los proyectos europeos en el marco de Erasmus +.

“Todas estas razones- afirma Galvín- hacen imprescindible un plan de actuación de legislatura para el profesorado que recupere los 1.000 millones arrebatados a la educación pública, que garantice la vuelta a las 18 y 23 horas lectivas, disminuya las ratios e incorpore 5 mil efectivos más al sistema público. Este plan de rescate debe, asimismo, estabilizar las plantillas mediante la convocatoria de 11.000 nuevas plazas en cuatro años y reducir la interinidad al 8%”.

No hay duda de la voluntad inequívoca de la comunidad educativa madrileña, que se movilizó el pasado junio para recabar 20 mil firmas exigiendo la vuelta a las 18 y 23 horas. Los sindicatos del sector las entregaron el día de 18 septiembre a la Consejería de Educación, que sigue negándose a revertir una medida tan necesaria para recuperar la calidad de la enseñanza pública. CC OO ha solicitado la puesta en reactivación de la negociación colectiva que lleva paralizada desde hace un año para desarrollar el Acuerdo Sectorial en materia de horario lectivo y plantillas, entre otras cuestiones.

“CCOO ha luchado por la reversión de esta medida desde el momento de su implantación; revertir los recortes sufridos y reducir el horario lectivo del profesorado es una prioridad. Si no hay negociación y no hay un plan que reduzca el horario lectivo del profesorado que venga acompañado del incremento de plantilla necesario, habrá movilización hasta conseguir que en Madrid se revierta la situación que actualmente vive el profesorado en Madrid y se consiga esta justa reivindicación, concluye Isabel Galvín”.