Federación de Enseñanza de CCOO de Madrid | 28 marzo 2024.

CCOO denuncia la cesión de una parcela municipal en Vicálvaro para construir un colegio concertado

  • El sindicato acusa al Gobierno regional de “engordar” a la Educación concertada con cesiones mientras debilita a la pública con recortes

El Ayuntamiento de Madrid ha anunciado la cesión de una parcela municipal de 23.000 metros cuadrados en el distrito de Vicálvaro al Gobierno regional para la construcción de un colegio concertado. Aplicando a ese terreno el precio medio por metro cuadrado en Vicálvaro, el valor de la parcela ascendería a 34.000.000 de euros de financiación para la educación concertada, mientras en la pública se recortan 1.117 profesores y profesoras y se cierran aulas.

22/12/2020.
CCOO denuncia la cesión de una parcela municipal en Vicálvaro para construir un colegio concertado

CCOO denuncia la cesión de una parcela municipal en Vicálvaro para construir un colegio concertado

La cesión se ha realizado a toda prisa, intentando adelantarse a la aplicación de la Ley Celaá, y es una de las varias escenas del teatro político que ocupa a la Comunidad de Madrid en su cruzada contra la nueva ley educativa.

Aunque la reciente defensa de la educación concertada ha sido enmarcada como una defensa de “la libertad de elección” de las familias y esta cesión de suelo ha sido justificada por la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, por la alta “demanda” por parte de las familias, lo cierto es que analizando los datos de escolarización en el distrito de Vicálvaro en el curso 20/21, queda claro que la demanda real ha sido hacia la educación pública, cuya falta de recursos ha dejado plazas sin cubrir y ha negado a innumerables familias la libertad de elección.

Como resultado de las políticas contra la educación pública de la Comunidad de Madrid, para el curso 20/21 se suprimieron un total de 7 aulas en el distrito de Vicálvaro: 3 de ellas en Educación Infantil y 4 en Educación Secundaria (Figura 1 del Anexo). Tras las solicitudes realizadas en el distrito y cruzando el dato con el número de plazas ofertadas, quedaron sin opción a ninguna plaza pública en el distrito un total de 96 estudiantes que la solicitaron como primera opción (Figuras 2 y 6). Además, se observó la necesidad de apertura de un aula de 1°de la ESO en el IES Villablanca, que ofrecía 0 plazas y había recibido un total de 22 solicitudes. (Figura 3)

Durante el proceso de escolarización, se realizó una reubicación del alumnado que se había quedado sin plaza en los centros elegidos en el área de escolarización que engloba Ciudad Lineal, San Blas y Vicálvaro. Esta reasignación resultó en un 46% del alumnado de Educación Infantil, siendo movido de centros públicos a centros privados/concertados; un 65% del alumnado sufrió este transvase en Educación Primaria; un 43% en Secundaria; y un 100% del alumnado de Bachillerato fue derivado a otros centros públicos diferentes a los elegidos por las familias. (Figura 5)

El Gobierno de Díaz Ayuso parece dar a estos estudiantes solo dos opciones: o a la concertada o a otro distrito.

Se trata por tanto de casi la mitad del alumnado acabando en un centro que no solicitó y en un centro de modelo distinto al solicitado, es decir, la mitad de las familias no tuvieron libertad de elegir educación pública. Las familias están siendo empujadas a elegir concertada. La “demanda” de la que habla Díaz Ayuso es artificial, el resultado de años de engordar a la educación concertada con cesiones mientras debilitan a la educación pública con recortes.

Esta medida llega en el contexto de protestas en Vicálvaro durante los últimos cinco años: las familias piden la construcción de un nuevo instituto público y la ampliación de otro de los existentes. La comunidad educativa en Vicálvaro ha dejado claro que lo que necesitan es más pública. Esta “demanda” parece no contar para la Consejería de Educación, lo cual demuestra que la oferta educativa no se mueve por la “mano invisible” de la oferta y la demanda reales, a las que el consejero de Educación hace oídos sordos, sino por los dedazos de un partido acostumbrado al amiguismo, las cesiones y el uso de lo público para beneficio de unos pocos.

El pasado mes de octubre, el consejero Ossorio dijo: “Si los padres quieren concertada, habrá concertada.” Le faltó decir que bajo el Gobierno madrileño, si los padres quieren pública, también habrá concertada. El Ejecutivo de Ayuso niega la libertad a las familias que eligen educación pública.